Hoy me he enterado, por las noticias, que a la señora Susan Boyle le han detectado un cuadro de nerviosismo agudo tras perder frente a un grupito de adolescentes el concurso de "Britains Got Talent". Al parecer la señora empezó a hacer el lili en el escenario tras saberse públicamente el fallo del jurado del concurso, y luego desde el hotel fue desde donde la trasladaron al hospital, por petición suya por cierto.
Esos son los datos oficiales. Lo que nadie puede imaginar (ni yo, válgame Santonia) es la presión de esa señora que frisa los cincuenta y a la que nadie prácticamente había tenido en cuenta hasta que se plantó con dos ovarios frente al gran público inglés. A pesar de su tan criticado aspecto desaliñado esa señora ha conseguido encandilar con su voz angelical a cuantos hemos tenido el placer de verla, en directo o no. Ahora analicen: cincuentona casi, a nadie le había importado su existencia hasta que cantó, y entonces se habla de ella hasta en la sopa, periódicos, internet (a la vista está...) televisión, radio y cuantos medios halla inventado la humanidad; se dice que si viste fatal, que si tiene una pinta ridícula, que si el pelo, que si la cara... Se cuenta su vida en verso en cualquier medio público (yo misma he leído su biografía en una revista no hace ni dos semanas), pero eso sí, se insiste en dos cosas, su aspecto y su voz que es capaz de arrancar la expresión de incredulidad más enorme al Risto de turno (que me perdone el señor Mejide, por cierto, y que quede claro que adoro sus críticas duras).
Todo el mundo la daba como absoluta ganadora. El año antes, si mal no recuerdo, un simple vendedor de móviles, Paul Potts, gordito y con cara de hombre sencillo sorprendió con una voz de tenor maravillosa; quizá por eso todo el mundo votaba por que ella ganaría. Y quizá nosotros mismos tengamos la culpa de hacer creer a Susan que ganaría también, y por ello seamos culpables de su cuadro psicótico. Ella era una mujer sencilla, con una vida normal, que se ha visto catapultada al reconocimiento internacional de la noche a la mañana... qué sentirían ustedes si creyéndose seguros ganadores (porque la opinión pública así lo ha querido, conste) en su misma boca le arrancan el caramelo. Yo creo que la culpa de la ida de coco de la pobre Susan es de la gente que la hemos escuchado y hemos dado por sentado que ganaría, y hemos llegado tan lejos que hasta ella misma ha llegado a asumir que ganaría por goleada. No la llamemos ahora loca, ese monstruo lo hemos creado entre todos.
Habrá quién diga que "pues que no se hubiera presentado si no quería ser famosa"... ese argumento me parece fuera de lógica, cada cual hace lo que quiera, y después de ello le devienen problemas o alegrías. Probablemente tengan su parte de razón quienes esgriman ese argumento, y probablemente Susan no calibró lo que podía acontecer tras su paso por el programa, pero ya no hay vuelta atrás. Sólo espero que la señora Boyle pueda cantar muy pronto otra vez, y que acepte alguna de las ofertas que tiene para grabar disco. Sería una lástima no verla actuar más.
Añado tambien un vídeo de Susan Boyle, en concreto ese en el que deja loco al "Risto" británico. (No sé porqué pero no he encontrado ningún vídeo que se pueda incrustar al blgo, lo siento, visitad el link)
http://www.youtube.com/watch?v=SVQfsBsi5zY
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